Por Omar Farías Luces
Culmina este año tan diferente, que nos deja experiencias que nunca imaginamos
vivir, sin embargo, supimos sobrellevarlas con aplomo, nos adaptamos a esta nueva normalidad en la que nos
encontramos ahora, así como logramos superar algunas adversidades.
Todo esto fue posible gracias a que mantuvimos la calma,
pensamos con cabeza fría y nos propusimos salir de esta, sanos y a salvo.
Entonces con esa misma entereza y
con los mejores ánimos debemos comenzar el 2021, quedará de nuestra parte hacerlo
con el pie derecho.
Asimismo, debemos tener presente que seguirán apareciendo desafíos en este año que está por
iniciar, por lo que la idea es mantener el norte fijo, la fuerza y la tenacidad
para enfrentarlos, y avanzar siempre en función de crecer personal y
profesionalmente.
En el ámbito laboral es necesario evaluarnos, identificar
nuestras debilidades y trabajar en pro de mejorar, para así poder desempeñarnos
eficientemente en nuestras áreas y generar más productividad. Recordemos que 2021 es una nueva oportunidad para evolucionar.
Por otra parte, nosotros somos nuestros principales jueces,
por eso la mejor recomendación para
la vida personal es reconocer todo el esfuerzo que hemos hecho durante el 2020,
sentirnos bien con nosotros mismos y agradecernos, valorarnos como las grandes
personas que somos.
Toda esa buena energía que resulta de ese ejercicio
personal, te invadirá e impulsará para seguir luchando y superando obstáculos
en el nuevo año; energía que podrás emanar a quienes te rodean y con la que
conectarán para formar un buen equipo que logre con éxito todo lo que se proponga.
En fin, pongamos toda nuestra fe y esperanzas en que el
2021 será mucho mejor, y que con nuestra constancia
todo saldrá bien. Por ahora recibamos este nuevo
año en armonía, junto a nuestras familias, con paz y amor para el mundo.